Te pasas las horas buscando un lugar blandito y confortable donde asentar tu cuerpecillo. O te dejas caer en el sofá del comedor sin darte cuenta de que no has pillado el mando de la televisón antes del fenómeno espanzurramiento en dicho sofá (uinch), con lo que optas por llamar a algún individuo que pulule por la casa para que te acerque el preciado objeto; o también puedes tumbarte directamente en la cama y entonces te preguntas ¿para qué la hice esta mañana?; o te aventuras a ir a la cocina tropecientas veces por si lo que estabas buscando antes en la nevera (y no has encontrado) ha aparecido por generación espontánea minutos más tarde; o te tiras en el suelo de cualquier lugar de tu hogar y meditas un rato sobre...sobre nada; o decides ir a incordiar a la mascota de turno (perro saltimbanqui con ganas de jugar a la pelota, gato gordo y agresivo acostumbrado a la buena vida, hámster poco sociable que no sale de su chalecito, serpiente que ni tuye ni buye mientras no se la moleste, cocodrilo que posteriormente dejarás en alguna alcantarilla, etc, etc.); o en caso de que no se disponga de una mascota te vas a tocar un poquito las narices al hermanito o hermanita que juega tranquilamente en su habitación sin que nadie le perturbe hasta tu apración; o te tragas todos los programas que nunca, nunca y repito nunca bajo ninguna circunstancia verías (por ejemplo, aguantar al calvito con tirantes y a la prepotente o a nuestro " querido " Peñafiel descubriéndonos el apasionante mundo monárquico en Está Pasando) si tuvieras algo que hacer; o pueds incluso vestirte con algo que no sean los trapillos para estar por casa y salir a dar una vueltecita por la calle siempre y cuando se cumplan tres condiciones:

1) Que tu grado de vaguería no sea muy alto y te permita desarrollar otras actividades a parte de espanzurrarte por todo lugar a tu alcance.

2) Que haga buen tiempo: solecito, calorcito y esas cosas y no vientos y nubes desagradables.

3) Que las tiendas donde malgastar tu dinerito estén abiertas de par en par para ti; si te pilla un día festivo (como hoy) pues ya la hemos fastidiado, el consumismo tendrá que esperar.

En fin, creo que así se podrían resumir esos días en los que el aburrimiento predomina por tu hogar.

En mi caso, hoy, Jueves 20 de Marzo de 2008, tengo que declarar que ha sido uno de esos días pachorriles hasta tal punto que me he puesto a leer El Mundo De Sofía (hay que tener ganas...), pero bueno si La Revolucionaria (sí, la chica ésa que se prepara croquetas de garbanzos para evitar que sus papis le obliguen a comerse su ración diaria de proteínas en forma de carne o pescado y que se le pone farruca al profesor de Filosofía) ya se lo ha leído (la tía se puso toda digna y se ofendió y todo cuando el profesor insinúo, con gran acierto, que seguramente nadie se lo había empezado a leer) pues yo no voy a ser menos.

Y por último y como mi cerebro hoy (y a estas horas) no da para más, os dejo un vídeo que he encontrado por mi apreciado YouTube y que ha hecho que me convierta en una seguidora incondicional del...¡¡PAVO DUSTIN!!...¡qué gracioso es!. Pensabáis que Rodolfo Chikilikuatre iba a arrasar en Eurovisión con su Chiki Chiki, pues ¡no!, va a ser El Pavo Dustin (reperesentante de Irlanda) con su Irelande Douze Pointe.

Arriba podéis contemplar la foto del cómico pavo irlandés. Yo le voto fijo.