¿Por qué hablar del jorobado y no de otro individuo más agradable para la vista?

¿Por qué dedicar el tiempo a contar su historia en lugar de, por ejemplo, entrevistar a Darek (ése que estuvo con Antoñita, La Fantástica) por su incorporación a Yo Soy Bea como hicieron ayer El Tirantes y La Sustituta de Lucía “No soporto a Peñafiel” Riaño en ese programa tan divertido que responde al nombre de Está Pasando? Pues porque no, no voy a caer tan bajo como ellos. ¡Qué interesante entrevista!:

INDIVIDUA DE LAS PREGUNTAS: Y vamos, con este cuerpazo...seguro que vas a volver loca a más de una ¿eh? (con cara de estar teniendo pensamientos impuros)

INDIVIDUA DE LAS PREGUNTAS: Sí, pero...a ver...me preguntan desde plató que si vas a enamorar a alguna de las chicas que trabaja en Boulevard 21 (sigue con los pensamientos pecaminosos).
DAREK (Ya no sé cómo hacerme famoso): Eeeeh...bueenoo...no puedo decir nada

Ayyy, que me tienen contenta El Tirantes y Cia. ¿¡Cómo se atreven a poner a parir a nuestra querida Patricia "Me descojono de todo Dios" Conde?! ¡Sinvergüenzas! Además, no entiendo una cosa: si es Patri la que ha dejado al garrulo de El Canto Del Loco (Sí, Dani Martín), ¿por qué decían ayer en sus originales comentarios que era El Garrulo el que había recuperado la cordura y había dejado de estar cegado por el amor? Mmmm, ¿no sería al revés?

En fin, que querían poner a parir a Patri y no sabían cómo:

COMENTARIO HIRIENTE Nº 1: Y éstas son las últimas imágenes de Dani Martín y Patricia Conde juntos. La presentadora como una reina del glamour, aunque de momento se quede en el camino, recorría el aeropuerto con una sonrisa nada creíble y haciendo gala de su terrible ironía mientras el cantante aguantaba como podía el espectáculo que estaba dando su novia.

Pero detrás de estos hirientes comentarios hacia su persona se esconde el fuerte odio y resentimiento que le tienen a todo el equipo de SÉ LO QUE HICISTÉIS. Ayer, lo pagaron con Patri. Mañana...quizás con El Pitufín (Ángel Martín).

Bien, ahora volvamos a la pregunta inicial, la del jorobado ese de Notre Dame. Pues, a ver, he decidido hablar de él porque en la tarde del Domingo (destinada al descanso post-rebajas) pude ver la película en la que trabaja y que se llama EL JOROBADO DE NOTRE DAME. Sí, trata de la vida del jorabado, es un biopic.

Creo que todo el mundo conoce a este pobre individuo, a este marginado social, una criaturilla con joroba a la que nadie quiere (ooooh). Sí, ¡¡EL JOROBADO DE NOTRE DAME!! Ay, pobre, vive bajo el cruel mote de jorobado. ¡Malvados, malvados, los que se lo hayan puesto! Ayyy.
Su nombre verdadero (el que sus papis le pusieron al nacer: Quasimodo…Quasi para los amigos (pensaréis que no tiene, pero alguno habrá). Los papis de Quasi eran más agraciados que él, es más, no encontraban ningún parecido con su pequeño monstruito. ¿A quién se parece?, preguntaban los más allegados y nadie tenía respuesta. A pesar de eso, le querían.

Fue el hombrecillo de nombre Walt Disney quien llevó su drama personal a la pantalla grande en forma de inocentes dibujitos. Bueno, en realidad, fueron los mandados de Walt los que lo hicieron porque recordemos que nuestro querido Walt disfruta de una plácida y fresquita existencia en un congelador, así que él no pudo ser.

La historia de Quasi es el típico drama social y/o culebrón para contar en El Diario de Patricia. Sí, seguro que La Gaztañaga (que lleva toda su vida de pie mientras habla con las gentes que van a su programa) se hubiera empezado a descojonar (como suele a hacer) de su invitado (Quasi) en cuanto hubiera aparecido por esa puerta giratoria que tantos disgustos ha traído (tropiezos, caídas, resbalones y demás accidentes).
Pobre Quasi, todo el mundo se ríe de él. ¡Basta! ¡Basta!
Como toda criaturita viviente él sufre (en silencio, pero sufre). Está harto de hacer sonar las campanas. Se está volviendo loco ahí dentro hasta el punto de que su locura (llamémosle trastorno psicológico) le ha llevado a dar nombre a todas y cada una de las campanas de la Catedral de Notre Dame (Louise Marie, Anne Marie, La Gran Marie, ¡qué lástima!) e incluso a reproducir (como si de un mismísimo psicópata se tratara) la ciudad entera de París con sus (felices) habitantes incluidos (el panadero, los gitanos, la lavandera, etc, etc.). ¿Qué planeará Quasi con esta mini-reproducción de la vida social?. Quizás, estudia los horarios de salida y entrada de cada uno para robarles sus casas…o simplemente, se deleita observando todos y cada uno de sus movimientos. NO, NO, la mente de Quasi no tiene maldad, él sólo se imagina que pasea por las calles parisinas (en lugar de permanecer escondido en el campanario) y por eso, su perturbada mente le ha llevado a reproducirse a sí mismo en una encantadora figurita de madera que alegremente coloca por las calles de la ciudad-maqueta. Así se entretiene nuestro amiguito. ¡Ay, criaturita!
Peeero, no todo iba a ser un camino de rosas (¿?), su marginada vida todavía puede empeorar muchísimo más…Sí, alguien le inquieta todos los días, alguien le saca de su fantasía social… es ¡¡FROLO!! (no confundir con el famoso hobbit gay de El Señor De Los Anillos llamado Frodo). Frolo es el juez (o algo así...vive en el Palacio de Justicia, así que…sacad vuestras conclusiones) de París. Este malvado personaje intentará por todos los medios hundir a Quasi llamándole feo, monstruo y demás adjetivos que le describen (físicamente). Frolo tiene su propia canción. Una canción en la que Quasi hace los coros (no tiene desperdicio):

FROLO: Eres feooo
QUASI: Soy feooo…
FROLO: Eres deforme
QUASI: Soy deforme…

La canción es graciosa, no me lo negaréis (estos de Disney, ¡qué sutiles!).
Sin embargo, no tiene ni pizca de gracia para el pobre Quasi, que piensa que es un monstruo debido a los hirientes (y realistas) comentarios de su perverso amo. Pero tranquilos, no sufráis, Quasi es un espíritu rebelde, él quiere ser libre, quiere ir a LA FIESTA DE LOS BUFONES…sin el permiso de su amo. Es un rebelde sin causa, es un adolescente en celo, es un pajarillo que quiere echar a volar, es ¡¡QUASIMODO!!
Con ayuda de sus amiguitos, las gárgolas (con las que mantiene largas y profundas conversaciones producto de su ya citado trastorno mental…irreversible, por cierto), salta desde lo alto de la catedral colgado de una cuerda a lo Tarzán y se planta en medio de la plaza donde se celebra el festival, di que sí, con un par, campeón. Pero la muchedumbre que disfrutando de los festejos allí se encuentra se siente terriblemente amenazado por este monstruito caído repentinamente del campanario.
¿Y qué hacen los pacíficos y agradables parisinos?...Imaginaos; le empiezan a tirar toda clase de verduras (tomatoes, potatoes…) a la cara para que sea más feo todavía, ¡qué crueldad!. En ese momento en el que Quasi está desesperado y pensando “tenía que haberme quedado en mi escondrijo, tenía que haberme quedado, tenía que haberme quedado” aparece una gitanilla, Esmeralda (mis recuerdos hacen que tenga que nombrar una telenovela del mismo nombre que la gitanilla a la que yo estaba enganchada en mis años infantiles. En este caso, Esmeralda era ciega, pero luego por arte de magia recupera la visión…ay, ¡qué culebrón!), y le da de beber agua como si de un animalito se tratara. Luego, hace sus reivindicaciones contra el sistema judicial que hay en París y se va cual saltimbanqui entre las masas. A partir de este acontecimiento, la monótona vida de Quasi da un giro de 180 º.